Además del recorte presupuestal para la alimentación, otras de las inconsistencias que se hallaron en la información brindada a través de la Plataforma Nacional de Transparencia fueron el bajo número de elementos veterinarios que hay al cuidado de 233 binomios pertenecientes a la Marina y la elevada cifra que se registró de "muertes por eutanasia" en los últimos cuatro años.
Ciudad de México, 19 de febrero (SinEmbargo).- Pese a la importancia de los binomios caninos en México, activistas denunciaron que el presupuesto destinado a la alimentación de los perros a cargo de la Secretaría de Marina Armada de México (Semar) sufrió un recorte de poco más de tres millones de pesos entre 2018 a 2022.
De acuerdo con la solicitud de información con folio 330026622001242, en el 2018 se destinaron 5 millones 36 mil 518 pesos para el alimento de binomios caninos, mientras que en el 2022 la cifra disminuyó a 1 millón 973 mil 370 pesos.
En entrevista para SinEmbargo, la activista Lucía Hernández, del proyecto de homeschooling “Amo la ciencia”, compartió que tras la muerte de Frida, la perrita rescatista que apoyó durante el sismo del 19 de septiembre de 2017, fue que empezó a buscar información respecto a los equipos de los binomios caninos en México.
"Esta [solucitud] es exclusiva de los perros de la Marina. La Marina tiene 233 perros ahorita en funciones y este recorte afecta a esos perros. En cuanto a la Secretaría de Defensa Nacional (Sedena) ellos tienen una sola partida presupuestal, lo que viene siendo los alimentos para animales que incluye su ganado, los caballos e incluso tienen caballos de lujo, y a los perros, entonces no se sabe exactamente cuánto gasta la Secretaría de Defensa en perros, tanto para acción militar como los de rescate", explicó Hernández.
"La Guardia Nacional publica nada más cuánto gasta en alimentos para perros, pero no publica cuántos perros son. La Guardia Nacional gasta alrededor de un millón de pesos en el alimento para los perros", agregó.
Según las licitaciones adjuntas a la solicitud de información, entre el alimento que se les compró a los perros en el 2017 se encuentra croqueta de gama premium como la Special Club: Perros de Trabajo HE, de Royal Canin, la cual contiene 30.0 por ciento de proteína cruda, 16.0 por ciento de grasa cruda y 2.8 por ciento de fibra; mientras que en el 2021 se adquirió el Purina Pro Plan, que contiene 26.0 por ciento de proteína cruda, 12.0 por ciento de grasa cruda y 4.5 por ciento de fibra cruda.
"Nosotros lo que hicimos fue preguntarle a un experto creador, que también se dedica a entrenar perros de trabajo, y nos dijo que las primeras marcas de otros años son de una calidad superior a la marca que está actualmente, que es para mascotas, que si bien es para perros muy activos o muy juguetones, pero no te da el desempeño para un perro que es de alto rendimiento o que es de trabajo", apuntó Hernández.
Ante la similitud de nutrientes entre ambos alimentos, SinEmbargo se puso en contacto con la médica veterinaria zootecnista Reyna Cofas Cuevas, egresada de la FES-Cuautitlán de la UNAM que cuenta con 17 años de experiencia, quien indicó que, en efecto, pese a que ambas croquetas pertenecen a una línea premium, "la Royal Canin sí es para perritos con mayor actividad física como los binomios, que tienen mucha exigencia".
"Tiene un mayor valor energético el Club HE comparado al de Pro Plan y por ejemplo, a veces [un alimento] puede tener un 35 por ciento de proteína por exagerar, pero si la digestibilidad de esa proteína se absorbe el 10 por ciento, entonces aunque tenga 35 pues de nada sirve que tenga tanta si nada más el perrito va a aprovechar el 10", explicó. "El de Royal tiene 30 por ciento de proteína de la cual es digestible el 26 por ciento y como son perritos muy activos pues por ese lado le ofrece más [...] Pro Plan es buena pero con perritos que no tienen una exigencia tan elevada de actividad", abundó.
La activista de “Amo la ciencia” compartió que entre las consecuencias que puede llegar a tener el cambio de alimento en los binomios caninos se encuentran, primeramente, el malestar estomacal y, a largo plazo, un agotamiento general en el cuerpo del animal por la falta de nutrientes.
"Lo podemos ver con un perro rescatista que está trabajando y está haciendo una labor muy desgastaste físicamente. Un perro desgastado básicamente está expuesto a enfermar y no tener una buena condición de salud".
Además del recorte presupuestal para la alimentación, otras de las inconsistencias que se hallaron en la información brindada a través de la Plataforma Nacional de Transparencia fueron el bajo número de elementos veterinarios que hay al cuidado de 233 binomios pertenecientes a la Marina y la elevada cifra que se registró de "muertes por eutanasia" en los últimos cuatro años.
Según los documentos que la Semar entregó en respuesta a la solicitud de información, la dependencia cuenta con tan sólo diez elementos veterinarios para el cuidado de 233 binomios caninos.
Asimismo, la información proporcionada por la Secretearía de Marina develó que entre 2015 y 2022 se reportó la muerte por eutanasia de 45 perros, de los cuales 34 fueron dormidos durante los últimos cuatro años.
El pasado 12 de febrero la Sedena anunció que Proteo, uno de los dieciséis perros rescatistas de la brigada mexicana que viajaron a Adiyaman, Turquía, para ayudar en las labores de rescate tras los dos terremotos que ocurrieron a principios de mes, "murió en el cumplimiento de sus labores de rescate".
Aunque en un principió trascendió que la muerte del animal de casi diez años fue causada por el desprendimiento de una estructura, el cabo Carlos Villeda, entrenador de Proteo, expuso en entrevista para Telediario que el binomio falleció por "situaciones del clima y la edad".
Ante la noticia, decenas de internautas cuestionaron el que hayan enviado a Proteo a Turquía pese a su edad.
"En este caso del perro Proteo yo creo que lo más relevante es que hubo una autorización para que se llevara pese a la edad que tenía y pese a las condiciones que podría haber tenido este perro, que al final de cuentas son diez años de edad pero son diez años de trabajo y en eso queremos hacer la diferencia, un perro de 10 años como mascota igual lo ves un poquito cansado y todo, pero éste es un perro que ha trabajado y varias horas al día", finalizó Lucía Hernández.